Todas las empresas de más de 50 personas trabajadoras deberán implantar un Plan LGTBI en el año 2024. Este plan debe incluir un protocolo de actuación para la atención del acoso o la violencia contra las personas LGTBI.
Plan LGTBI y la normativa aplicable
La Ley 4/2023, de 28 de febrero, con el objetivo de la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de sus derechos, entró en vigor el 2 de marzo de 2023. Esta normativa incluyó nuevas obligaciones para las empresas. Esta ley de igualdad tiene como objetivo de promover la igualdad de las personas LGTBI y tiene repercusiones en el ámbito laboral.
Esta obligación se encuentra recogida en el artículo 15 de la ley y finalizaba el 2 de marzo de 2024, pues se establecía un plazo de 12 meses para llevarlo. Sin embargo, no ha sido hasta ahora (seis meses después), el 9 de octubre de 2024, cuando se ha publicado el Real Decreto 1026/2024, de 8 de octubre, en el BOE.
En qué consiste
Un Plan, es decir, Protocolo LGTBI es un conjunto de medidas y recursos para alcanzar la igualdad real y efectiva de las personas LGTBI. Incluye un protocolo de actuación para la atención del acoso o la violencia contra las personas LGTBI.
Al igual que sucede con el plan de igualdad para empresas, el protocolo tiene que ser pactado a través de la negociación colectiva y acordado con representantes legales de los trabajadores.
Vigencia del Plan LGTBI
Su vigencia es de cuatro años. En ese plazo se deben implementar las medidas y actuaciones reflejadas en el mismo. De esta manera, cuando se proceda a la renovación se podrá justificar las mejoras incorporadas en la compañía en materia de igualdad.
¿Es obligatorio en las empresas de menos de 50 trabajadores?
Las empresas de menos de 50 trabajadores deberán contar con un Registro Retributivo que es obligatorio desde el 14 abril de 2021. También deberán contar con un Plan de Igualdad si así lo requiere el Convenio Colectivo o por la imposición de una autoridad laboral al aplicar un procedimiento sancionador. También, si se quiere acceder a ayudas o concursos públicos, muchos de ellos tendrán como requisito tener implantado el Plan de Igualdad.